Un interior chic francés

Atemporal, elegante y neutro es cómo definiría el apartamento parisino del fotógrafo Matthew Brookes. Ubicado en el emblemático barrio de Le Marais, este estudio de tan solo 60 m2 destila encanto y del bueno gracias a un interior repleto de piezas procedentes de rastos y anticuarios mezcladas con madera antigua y metal. Este mix entre clasicismo francés y loft neoyorkino conquista por su sencillez y enamora por su suave gama cromática. Detalles como la lámpara de araña o el espejo de madera tallada sobre la chimenea, ambos del siglo XVIII, ponen la guinda a este interior chic francés irresistible.