Cuando el color gris es el protagonista en la decoración, los espacios se tornan elegantes por naturaleza. Una combinación sencilla y que ofrece unos resultados espectaculares. En espacios nórdicos o en ambientes clásicos, siempre es un acierto. El caso de hoy es un espacio más clásico donde las rayas aligeran el conjunto y donde el gris profundo se vuelve más espectacular que nunca en el dormitorio. Espero os guste!!
Imágenes con el consentimiento de House and Leisure