Negra por fuera, blanca por dentro, no, no es una adivinanza sino una preciosa casa sueca. Una bonita casita de madera en el campo que respira encanto y derrocha calidez. Cómoda e informal, luminosa y con una decoración mezclada en estilos y rica en texturas, en fín una casa llena de detalles como la mesa de centro árabe, el mix de diferentes sillas en el comedor o la cocina ubicada en el exterior. ¿Que os parece?
Imágenes: Kml Design